Ayer sí que se jugó bien, como se debe.
Lo único que se le puede echar en cara a Del Bosque (no es poco; nos pudo costar un empate y la incertidumbre de la prórroga y de los penaltis) es su proverbial "habilidad" en los cambios.
Hubiese sido mejor meter a Navas o a Mata (o a Pedro como hizo él más tarde) a la vez que metió a Llorente. Como no lo hizo en el momento, al menos debería haberlo hecho cuando el partido empezó a estar claramente de ida y vuelta, ya que alguno de esos tres o Cesc (¿por qué nunca le pone?) aprovecharían mejor que ningún otro el contraataque y el juego de espaldas de Fernando Llorente, un gran jugador y un recurso extraordinario para los partidos que se nos ponen como éste. Buena opción para el partido contra Paraguay que, por desgracia, se parecerá bastante al de Suiza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario