Entretenida carrera la vivida hoy en el circuito británico de Silverstone, con un enorme Lewis Hamilton que ha ganado la partida a su compañero Nico Rosberg gracias, y será algo que Williams tardará en olvidar, a que sus rivales no han permitido a Valteri Bottas adelantar a un algo más lento Felipe Massa.
Fuente Getty Images |
Tras una muy buena salida de los dos Williams y una no especialmente mala de Mercedes, pero algo falta de nervio, los dos Mercedes han cerrado ese cuarteto de cabeza durante gran parte de la carrera. En esta primera vuelta, Daniel Ricciardo ha comenzado una reacción cadena en la parte trasera de la carrera, que ha terminado con una colisión entre los dos Lotus que, a su vez, ha propiciado que el McLaren de Fernando Alonso golpease al de su compañero. Lo que parecía un golpe con graves consecuencias para el asturiano, se ha saldado para él con una larga parada en boxes durante el Safety Car para cambiar el morro y, eso sí, con el abandono del coche de su compañero Jenson Button. Tampoco completaron la primera vuelta los Lotus de Romain Grosjean y Pastor Maldonado.
El relanzamiento tras el coche de seguridad ha sido apasionante. Lewis Hamilton ha intentado adelantar a Valteri Bottas mientras trataba de evitar que le adelantase Rosberg y quien mucho abarca, poco aprieta. Ha estado a punto de aprovechar esta lucha a dos bandas el alemán Sebastian Vettel la situación, aunque al final no ha podido pasar a ninguno de ellos.
Más tarde (y tras una inteligente maniobra de distracción al amagar con un pit stop de Mercedes),Lewis Hamilton ha adelantado su parada respecto a los tres coches de delante. Esto le ha servido al piloto inglés para pintar todos los sectores de morado y, en una buena vuelta, ganarle la partida a unos Williams que han errado en cada una de las decisiones que han tenido que ir tomando durante la carrera, probablemente por ser demasiado conservadores.
En la vuelta 34, el Toro Rosso de Carlos Sainz se ha apagado en la última curva y han sucedido dos cosas: por un lado, se ha podido ver en acción el Virtual Safety Car en un tramo suficientemente amplio de carrera como para sacar conclusiones (parece que, a diferencia delSafety Car "físico", el virtual controla mucho más las velocidades debido a que les van marcando los tiempos máximos por sector a los pilotos, lo que evita el agrupamiento de los coches) y por otro lado, se ha visto al madrileño muy enfadado por la situación. Sainz ha golpeado su volante,frustrado seguramente no sólo por el abandono en sí, no sólo por estar en los puntos en ese momento; estaban comenzando a caer las primeras gotas de lluvia y aún tenemos en la memoria la demostración de Carlos en la última carrera con agua.
Tras esto, la tensión ha llegado a través de la lluvia, las salidas de pista y las diferentes estrategias seguidas por los equipos. Ha sorprendido ver a un piloto como Valteri Bottas quedarse atrás con un Felipe Massa que no es, ni mucho menos, alguien a quien se le de especialmente bien conducir sobre asfalto mojado. Probablemente, el finlandés perdió la carrera mucho antes,cuando nadie le dijo por radio a su compañero aquello de "Felipe, Valteri es más rápido que tú". De hecho, Bottas se ha bajado del coche tan decepcionado que parece estar a pensando en que la próxima temporada podría estar en Ferrari.
Los primeros en montar los neumáticos intermedios han sido los "pequeños", y entrecomillamos "pequeños" porque cuesta meter en esa categoría a un gigante como McLaren-Honda. Tras ellos, el resto comienza a hacer lo mismo después de unas vueltas de incertidumbre. Kimi Räikkönen, tras ser adelantado en una valiente maniobra de su compañero Sebastian Vettel, el finlandés entró también a montar un juego de intermedios. Mientras, Rosberg comenzó a recortar a marchas forzadas tiempo a su compañero, éste realizó la maniobra, no ya de la carrera; quién sabe si de la temporada. Había dejado de llover unas vueltas atrás, quienes habían montado intermedias antes que el resto, estaban sufriendo bastante puesto que estaban prácticamente con slicks debido al desgaste por los tramos secos del circuito. En ese momento, cuando desde el muro le decían que aún no era el momento, Lewis Hamilton decidió parar a cambiar ruedas. Tanto él como Sebastian Vettel, acertaron de pleno puesto que comenzó la lluvia, y lluvia de verdad.
Entonces, Hamilton adelantó fácilmente a Massa y, tras la inevitable parada de Rosberg, el británico se convirtió en el líder de la carrera de casa, seguido por dos alemanes, Nico Rosberg y Sebastian Vettel.
La carrera de los españoles deja un sabor agridulce. Agrio, por supuesto, por el abandono de Carlos Sainz en el mejor momento para él; dulce por la mejor posición de Roberto Merhi en toda la temporada; agridulce porque, a pesar de que Fernando Alonso ha conseguido su primer punto de este proyecto a medio plazo en McLaren-Honda, los de Woking quedan bastante señalados por varios errores no achacables a la parte japonesa de este matrimonio. Efectivamente, tienen uno de los peores motores de la Fórmula 1, pero no es culpa de Honda que pasen cosas como que el sábado le montaran un neumático de Button al coche de Alonso, cosas como que a tiro de piedra de tu propia fábrica, no seas capaz de encajar el morro al intentar cambiarlo.
Fuente Formula1.com |
Ahora, a esperar tres semanas para que llegue un GP de Hungría que se presenta calentito. Y caluroso.
A. Santiago @soyelantonito
No hay comentarios:
Publicar un comentario